Zaragoza: lo que queda de los asaltos (I)

Dejando atrás Barcelona y tras pasar brevemente por Lleida, llegamos (y hablo en pasado) a Zaragoza. Antes, me había preocupado, primero, de ver vía Last.fm si había algún evento musical reseñable en esas fechas (no lo había) y segundo, había estado rebuscando en la memoria y en internet todo lo referente a los asaltos, esos tres festivales de arte urbano que la ciudad había acogido en ¿2005?, 2006 y 2007 (Primer, Segundo y Tercer Asalto respectivamente).

La verdad es que mis esperanzas de encontrar algo tres, dos y un año después eran más bien escasas, pero supongo que la mera posibilidad de ver las (grandes) obras (grandes) de Blu en vivo mantenían el espíritu algo excitado... Con unas mini-PáginasAmarillas en la mano y la cámara a la espalda empleé alrededor de hora y media en recorrer el centro histórico de Zaragoza, entre la zona de la Plaza de España, la calle de Don Jaime I y la calle Refugio y la Avenida de César Augusto. En la primera hora encontré bastante material que luego descubrí pertenecía al Tercer Asalto, y al que daré salida en otra entrada, pero el mayor impacto lo provocaron las obras encontradas en los alrededores de la Plaza Ecce Homo, un espacio muy cercano ya de la Avenida de César Augusto y que se reparte, como una calle, a ambos lados de un edificio.

Las primeras obras las encontré en el extremo "oriental", más cercano a la Avenida César Augusto. Junto a algunas pertenecientes a Tercer Asalto (entre ellas las de Frágil, 108 o MyMonsters), sobre las que, insisto, volveremos, estaba la obra de Eltono que muestra la primera imagen de esta entrada. Teniendo en cuenta lo difícil que resulta últimamente ver obras de calle de Eltono, la impresión fue la de estar ante una obra nueva, inédita, aunque tuviese ya dos años.


No obstante, el plato fuerte esperaba en la otra parte de la plaza. La calle/plaza desembocaba en un nuevo espacio abierto en el que desemboca la calle de Galo Ponte y que está ocupado por dos solares. Al fondo, se podía ver enseguida la primera de las obras de Blu, compartiendo espacio con otra obra de Eltono. Nunca había visto, en vivo y hasta entonces, un Blu tan grande (mi experiencia en ese sentido se limitaba a su pintura de la calle Jesús y María en Madrid, de bastante menor tamaño).


Volviendo la mirada atrás, hacia el lugar de donde venía, descubrí el otro solar, protagonizado por obras de Eltono (de nuevo), Nuria y San, todo un muro en el que las paredes de antiguas viviendas hacían las veces de lienzo. Son perfectamente reconocibles, pero por si acaso las obras de San están a la izquierda y las de Eltono y Nuria a la derecha.


El solar tenía un pequeño muro de ladrillo que impedía el acceso al mismo, así que para poder fotografiar la pared en condiciones tuve que subirme a él (saltarlo no entraba en mis planes). Desde allí se tenía una doble visión: a la izquierda el muro de Eltono, Nuria y San y a la derecha el muro de Blu, Eltono y... ¡otro Blu!, en uno de los laterales del mismo edificio.


Para cerrar mi recorrido del día, caminé por el lateral hacia la calle de Fuenclara e hice algunas fotos de este segundo Blu, con tan mala suerte que la valla por un lado y el corte sombra/luz por otro no permitieron que las imágenes sean tan significativas y completas como me hubiese gustado. Aunque verse se ve.


Si todas estas obras han aguantado dos años (con Expo de por medio), es probable que aguanten un poco más, así que recomiendo a todo aquel que se acerque a Zaragoza que se pase por la zona. Es gratis. E impresiona. Os dejo por si acaso alguien se anima un mapa con la situación de las distintas obras: uno general y otro en detalle.