Valencia, diciembre de 2012 | Los grandes murales
[Casi diez días sin dar señales de vida. Es lo que tiene quedarse de repente, porque sí, sin la cámara que ha venido registrando en los últimos seis años el 99% del material publicado aquí. Mientras nos recuperamos y esperamos nueva compañía...]
Valencia me agobia. Para bien. Pensar en pasar unos días allí me genera un extraño pero fortísimo desasosiego, producido por todo lo que quiero ver y fotografiar, una ansiedad de la que pienso que no seré capaz de librarme pero que al final me permite escapar, dejándome disfrutar de una ciudad que cada vez me gusta más. El puente de diciembre lo pasamos allí. Esta entrada y las que vendrán son sólo una pequeña muestra de lo bien que lo pasamos, dos años después.
Blu y Escif en la plaza del Tossal. Blu, la religión del dinero y el dinero de la religión. De cabeza a mi lista de murales favoritos.
Erica Il Cane en la calle de San Dionisio, calle Alta y calle Baja (junto a Escif), respectivamente. Encontrarme en Valencia por primera vez (en vivo) con la obra de Erica Il Cane sirvió para (de momento) llegar a la conclusión de que su trabajo no me entusiasma. Y no estoy diciendo que no sea bueno, ojo.
Y Blu, esta vez en la calle Corona. Bastante menos potente que el de más arriba, pero Blu al fin y al cabo.
Sobre la iniciativa gracias a la cual existen todos estos murales podéis encontrar toda la información aquí.
2 comentarios:
Las fotos son muy buenas. Hacen justicia a la impresión que provoca ver las obras en directo. Y estoy contigo, Valencia genera una especie de síndrome de Stendhal por la ingente cantidad y calidad de su street art.
Tengo los mismos murales fotografiados!!! Llama mucho la atención pasear por ese rincón de mi ciudad.
Besos!
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